Ganando batallas espirituales

   Al enfrentar a Goliat, David no preguntó: ¿Cuánto pesaba, qué estatura tenía, qué tipo de armas usaba, qué tan resistente podía ser su armadura o cuántas peleas habia ganado? David se concentró en Dios, sabiendo confiadamente que cualquier cosa que Goliat podría traer a la batalla no se comparaba para nada con el poder de Dios (leálo en 1 Samuel 17:45-47).



 
   Esto nos pone a pensar: “¿En qué nos enfocamos cuando enfrentamos los gigantes en nuestra vida? ¿Nos concentramos en los obstáculos en nuestro camino o en el poder y el propósito de Dios? ¿Vemos solamente nuestras propias limitaciones o vemos los atributos y recursos ilimitados de nuestro Dios?
 
   Es importante hablar con Dios sobre nuestros problemas. Pero no olvidemos hablarles a nuestros problemas sobre nuestro gran Dios. Él debe ser el enfoque en la vida del vencedor.


Por Ramón Tovar 
Síguemnos en https://www.facebook.com/gotasde.valor
Twitter: @gotasdevalor1

Comentarios

Entradas más populares de este blog

NUESTRO PRONTO AUXILIO

LLAMADO A SALVAR ALMAS

A SOLAS CON DIOS